Cuando una persona entra en coma, puede deberse a muchas razones distintas, desde lesiones cerebrales traumáticas a enfermedades graves, pasando por comas inducidos médicamente. Independientemente de la razón subyacente, la mayoría de los pacientes en coma tienen algo en común. Normalmente, están confinados en una cama, sin que su cerebro esté alerta a los estímulos externos, de forma similar a estar en un sueño profundo. Los que están en coma suelen estar dentro de los confines estériles de una habitación de hospital durante un tiempo prolongado. Muchos creen que las úlceras de decúbito se desarrollan porque el paciente permanece tumbado en la cama durante mucho tiempo. Sin embargo, aunque el riesgo es innegable, es importante reconocer que existen procedimientos que pueden aplicarse para prevenir la aparición de úlceras por presión.

Los hospitales y los centros de cuidados a largo plazo tienen la responsabilidad de conocer y aplicar medidas preventivas contra las úlceras por presión, pero lamentablemente pueden producirse descuidos en este deber, que provocan la aparición de úlceras por presión graves que pueden incluso causar septicemia. Las consecuencias de las úlceras de decúbito no tratadas pueden agravarse rápidamente, suponiendo importantes amenazas para la salud e incluso la vida de los pacientes comatosos. Sin embargo, las úlceras de decúbito suelen prevenirse con los cuidados adecuados y una atención diligente. Si tu ser querido es víctima de úlceras por presión debido a una atención negligente, ya sea en un hospital, en casa o en un centro de cuidados de larga duración, puedes interponer un recurso judicial. Nuestro equipo de Abrahamson & Uiterwyk sabe lo importante que es prevenir las úlceras por presión en los pacientes en coma, y lo importante que es tratarlas y vigilarlas adecuadamente cuando se producen. Buscar asistencia jurídica de un abogado especializado en lesiones personales cerca de ti, en nuestro bufete, podría llevar potencialmente a las familias a obtener una indemnización por las úlceras por decúbito no tratadas, que se producen como consecuencia de una atención negligente. Ponte en contacto con nosotros hoy mismo.

¿Cómo se contraen las úlceras por presión?

Las úlceras de decúbito, también conocidas como úlceras por presión o úlceras por decúbito, están causadas por una presión prolongada sobre la piel y el tejido subyacente. Este tipo de úlceras suele producirse en zonas donde los huesos están cerca de la superficie de la piel, como la:

  • Tacones
  • Tobillos
  • Caderas
  • Columna vertebral
  • Coxis

Los pacientes en coma son especialmente vulnerables al desarrollo de úlceras por presión debido a su estado de incapacidad y a su imposibilidad de cambiar de postura o moverse. Al permanecer inmóviles durante periodos prolongados, la presión constante sobre zonas concretas del cuerpo sin medidas preventivas puede provocar la formación de úlceras por presión. Estas úlceras pueden manifestarse a lo largo de horas o días. Aunque muchas úlceras de decúbito pueden curarse con un tratamiento adecuado, otras no, dejando al paciente en riesgo de desarrollar infecciones. Tomar medidas proactivas para prevenir las úlceras por presión en los pacientes en coma y proporcionar los cuidados adecuados cuando se desarrollan puede ayudar en el proceso de curación.

¿Cuáles son las cuatro fases de las úlceras por presión?

Los profesionales sanitarios, ya sea en hospitales, residencias de ancianos o centros de atención domiciliaria, desempeñan un papel importante a la hora de identificar y tratar las lesiones por úlceras por presión, sobre todo en personas encamadas o en coma. Las enfermeras o los auxiliares sanitarios que ayudan en las tareas de cuidado personal también pueden ser una fuente de vigilancia para detectar signos de lesiones por presión. En el caso de los pacientes en coma, que están confinados en una cama y no pueden moverse, es esencial estar atentos a las fases iniciales de las úlceras por presión en el cuerpo y aplicar cuidados inmediatos y vigilar las úlceras para asegurarse de que no empeoran. Las úlceras por presión se clasifican en cuatro etapas principales, cada una de las cuales indica la gravedad de la afección. Comprender estos estadios es un aspecto importante de la detección e intervención tempranas para evitar mayores complicaciones. Según John’s Hopkins Medicine, los cuatro estadios de las úlceras por presión son:

  • Fase 1 – La primera fase de las úlceras de decúbito presenta una aparición inicial de una zona roja, azul o violácea parecida a un hematoma en la piel. Puede sentirse caliente, y el individuo puede experimentar sensaciones de quemazón o picor. Sin embargo, en un paciente en coma, no podrá informar al médico o al personal de enfermería sobre estas sensaciones.
  • Fase 2 – La zona que inicialmente tenía un aspecto similar al de un hematoma ha evolucionado hasta convertirse en una llaga abierta parecida a una abrasión o ampolla. Junto con la abrasión cutánea, puede producirse una decoloración continuada de la piel circundante, y la zona suele doler al tacto o cuando el paciente se mueve.
  • Fase 3 – La tercera fase de las úlceras por presión incluye la profundización de la úlcera, formando un aspecto similar a un cráter. Junto con la penetración de la úlcera de decúbito en la piel y el tejido, pueden aparecer manchas oscuras de piel alrededor de los bordes de la herida.
  • Estadio 4 – El peor estadio de las úlceras por presión, el estadio cuatro incluye daños graves que se extienden al músculo, el hueso o las articulaciones. Este daño extenso podría dar lugar a complicaciones como la osteomielitis (infección ósea) o la sepsis (infección sanguínea), que pueden poner en peligro la vida si no se tratan con terapias agresivas.

También es importante tener en cuenta que hay un tipo de úlcera por presión denominada «lesión por presión de espesor total no estadificable», que se refiere a una úlcera de estadio 3 o 4 que está cubierta de tejido muerto (eshar) o tejido viscoso y espeso (esfacelo). Esto dificulta la determinación de la gravedad de la herida.

Conocer las fases de las úlceras de decúbito en los pacientes en coma permite a las familias y a los profesionales sanitarios proporcionar un diagnóstico precoz eficaz y tratarlas con prontitud para evitar que el estado empeore. Esta información también proporciona a las familias la capacidad de determinar cuánto tiempo lleva formándose la úlcera de decúbito, y si se trata o no de una atención negligente.

Así se evitan las úlceras por presión en un paciente inconsciente

Los centros sanitarios, sobre todo los especializados en el cuidado de pacientes comatosos, como hospitales y centros de cuidados de larga duración, deben disponer de protocolos minuciosos para prevenir la aparición de úlceras por presión. Aunque estos pacientes no respondan al dolor ni a los estímulos externos, mantener la integridad de su piel previniendo las úlceras por presión es una parte importante del cuidado de su salud y bienestar generales. Los protocolos establecidos para prevenir las úlceras por presión pueden incluir lo siguiente.

Cambios regulares de posición cada pocas horas

Un aspecto importante de saber cómo prevenir las úlceras por presión en un paciente inconsciente consiste en cambiarle de posición con regularidad, normalmente cada pocas horas. Esta rotación por varias posiciones a lo largo del día es esencial para minimizar el riesgo de desarrollar úlceras por presión. El reposicionamiento de los pacientes comatosos implica cambiarlos de una posición a otra, como pasarlos de la espalda al lado derecho, luego al izquierdo, y así sucesivamente. Dado que los pacientes comatosos no pueden mantenerse en estas posiciones por sí mismos, para mantenerlas eficazmente se utilizan almohadas y dispositivos de apoyo para evitar que el peso del paciente los desplace de la posición deseada. Al cambiar de posición a los pacientes a lo largo del día, se garantiza que el paciente tenga un alivio continuo de la presión y se reduce la probabilidad de que se formen úlceras por presión.

Uso de cojines de espuma

En un esfuerzo por prevenir las úlceras por presión en los pacientes en coma, la incorporación de cojines de espuma suele formar parte del protocolo, ya que puede ser una estrategia eficaz. Estos cojines se utilizan para distribuir la presión uniformemente por todo el cuerpo, reduciendo eficazmente el riesgo de irritación en las zonas donde el hueso está cerca de la piel. Al proporcionar una superficie de apoyo pero blanda y suave, los cojines de espuma ayudan a mantener la integridad de la piel, sobre todo en pacientes en coma que permanecen inmóviles durante largos periodos de tiempo. Integrar el uso de cojines de espuma en los protocolos de atención al paciente en coma pone de relieve el compromiso con una atención proactiva e integral, que garantice el bienestar y la comodidad de los pacientes en coma.

Mantén la piel seca, limpia y desinfectada

Mantener la piel seca, limpia e higienizada es un aspecto importante de la prevención de las úlceras por presión en los pacientes comatosos. Una piel limpia reduce la probabilidad de que se desarrollen úlceras o se infecten, lo que pone de relieve la importancia de bañarse regularmente con agua templada y jabón suave. Después del baño, es esencial secar bien la piel para eliminar la humedad persistente, ya que la humedad también puede contribuir a la formación de úlceras. Los cambios rutinarios de sábanas, la inspección diligente de fugas de catéteres y los cambios regulares de pañales son también una parte esencial del cuidado de los pacientes comatosos. Estos protocolos preventivos de las úlceras de decúbito no sólo fomentan la salud de la piel, sino que también reducen el riesgo de que se desarrollen úlceras por presión, contribuyendo así al bienestar general del paciente.

Ejercicio

Incluso cuando un paciente está en coma, es imprescindible que haga ejercicio para prevenir las úlceras por presión. Seguir un régimen de ejercicio diario implica manipular suavemente sus extremidades para estimular la circulación sanguínea y prevenir la atrofia muscular. Los hospitales y centros de cuidados de larga duración suelen incluir sesiones de fisioterapia en el protocolo de cuidados de los pacientes comatosos, incorporando movimientos y masajes varias veces por semana. Estos ejercicios rutinarios no sólo favorecen la circulación, sino que también ayudan a mantener el tono muscular, reduciendo el riesgo de desarrollar úlceras por presión debido a permanecer demasiado tiempo sentado en un mismo sitio.

Prevenir las úlceras por presión es una obligación ética

Aplicar protocolos para prevenir las úlceras por presión no es sólo una cuestión de necesidad médica, sino también un aspecto fundamental de la prestación de cuidados humanitarios. Como profesionales sanitarios, es una obligación ética adherirse al principio de «no hacer daño» y prestar los mejores cuidados a todos sus pacientes, independientemente de que estén alerta o en coma. Prevenir las úlceras por presión no es sólo una cuestión de práctica médica. Es también un testimonio de su compromiso de defender la dignidad y el bienestar de todas las personas a su cuidado.

Si sospechas que tu familiar, que está en coma, está recibiendo cuidados negligentes y desarrollando úlceras por presión como consecuencia directa, no dudes en ponerte en contacto con nuestro equipo de abogados especializados en lesiones personales de Abrahamson & Uiterwyk. Estamos aquí para llevar a cabo una investigación exhaustiva del asunto y asegurarnos de que tu ser querido recibe los mejores cuidados y el mejor tratamiento que se merece. Nuestro equipo también trabajará incansablemente para conseguir una indemnización por cualquier daño causado por una atención negligente, proporcionando apoyo y defensa a tu familia en cada paso del camino.